lunes, 31 de mayo de 2010

El Trabajo os hará libres


Muy irónicos los nazis ¿verdad? Una de las experiencias más fuertes de mi vida fue la visita al campo de concentración de Auschwitz en Polonia. Ese día cuando todas y cada una de las personas que lo visitamos salimos de alli con los ojos llorosos y nos montamos en el autobus nadie tenía ganas de hablar ni de comentar nada. Se hizo un silencio tremendo. Habíamos tenido un día de lluvia incesante, un pequeño chispeo que nos acompañó durante todo nuestro recorrido por los barracones, las montañas de zapatos de los judíos, el crematorio junto a la casa del comandante y su familia, la cámara de gas... Pues bien, cuando todos estabamos, en silencio, sin ganas de hablar y mirando la lluvia a través del cristal del autobus, de repente las nubes se retiraron del cielo y salió el sol. El arcoiris más maravilloso que he visto nunca atravesó el cielo. Y poco a poco nos fuimos animando, volviendo a la vida. De aquella experiencia extraje dos cosas: la primera, la convicción de que por muy mal estén las cosas siempre puede salir un arcoiris. De ahi mi carácter siempre positivo. La segunda, y es algo en lo que me reafirmo cada día, que el Ser Humano es capaz de hacer las cosas más maravillosas, pero también las más terroríficas. Aquel comandante del campo de concentración vivía con su familia a pocos pasos del crematorio en el que cada día desaparecían los restos de los judíos gaseados. Probablemente sería un buen esposo y un buen padre, pero a la vez un asesino implacable. Pues bien, hoy me reafirmo en esta reflexión... Incluso el pueblo que sufrió todo aquello hoy es capaz de asaltar en mitad de la noche una flota que llevaba ayuda humanitaria a los habitantes de la fraja de Gaza... ¿irónico verdad? El Trabajo os hará libres... Por cierto, la primera entrada escrita desde el trabajo, de ahi el título... Menos mal que es una semanita corta...

No hay comentarios:

Publicar un comentario